A lo largo de nuestras relaciones, muchas de ellas van generando cosas tóxicas para nosotras y por lo tanto hay que evitar este tipo de situaciones, para no hacernos un daño innecesario y que no aporta nada constructivo, además de poder destruir otras relaciones y nuestra salud mental, generando emociones muy perjudiciales y evitables. Cuando comenzamos a tratarnos mal en una relación con otra persona (generando dependencia emocional, agobiando y robándole energías a la otra, no dejando expresar las emociones y lo que pensamos, negando la libertad de la otra, sus deseos, inquietudes, necesidades, aprovecharse de las carencias de otra para poder manipularla, forzando situaciones, desnaturalizando lo que sentimos mediante la razón y un largo etcétera de situaciones y cosas que nos generan emociones perjudiciales para nosotras y que envenenan e intoxican nuestras relaciones), hay que dejar un espacio y darse tiempo y recuperar esa relación cuando haya mejorado, para que no degenere y acabe destruyéndose, basándonos en nuestras carencias emocionales y afectivas que buscamos en las demás, en vez de en nosotras mismas, nadie nos va a llenar más y además sólo nosotras estaremos cuando nos necesitamos. Personalmente tengo varias relaciones tóxicas y procuro limitarlas mucho, ya que me provocan ansiedad, estrés, dependencia o tristeza, pero les doy un poco de mi tiempo porque son importantes para mí, pero no les dedico más tiempo del que pienso que se merecen. Poco a poco podemos ir planteando a la otra persona los errores que comete, que nos hacen sentir negativo y cómo podriamos mejorar la relación si es que queremos que ésta dure en el tiempo y podamos hacerla más profunda. A veces, de forma epicurea podemos acabar con nuestras relaciones, por facilidad, pero a la larga perder y romper muchas relaciones es más perjudicial que positivo, aunque a corto plazo nos venga bien acabar con una relación tóxica. Tengamos relaciones sanas y libres, aprendiendo juntas y equivocándonos juntas. Alejaros de mí cuando queráis y dejadme volved si lo véis oportuno, si no, da igual, hay millones de personas en el mundo y nadie es mejor que nadie.