Nota aclaratoria: Este blog y la distri terminaron hace años por pertenecer exclusivamente a Jaime Sanchez Martínez, perpetrador y perpetuador de varias agresiones machistas a diferentes personas en el Estado Español, por eso desde aquí se insta a la retirada de cualquier material editado y/o escrito por la misma.

¡Boikot al anarcomacho! ¡No más cobertura a actitudes patriarcales ni a machistas infiltrados!

viernes, 26 de febrero de 2010

EL SUCIO NEGOCIO DE LOS BARES

INTRODUCCIÓN

Hemos decidido hacer un folleto criticando los bares debido a lo negativos que resultan para la sociedad y para las personas implicadas en los movimientos sociales. En primer lugar porque parece que se limitan a estos espacios nuestros lugares de encuentro, dejando de un lado la reivindicación de las calles y lugares abandonados. En sucesivo le seguirán razones muy poderosas por las que deberíamos evitar estos lugares, como la venta de carne, de alcohol, de tabaco; las relaciones que se dan en su interior; el enriquecimiento de empresarixs y la explotación de sus trabajadorxs. Está en tu mano no colaborar con todo esto.

EN BUSCA DE ESPACIO

¿Por qué pase lo que pase los bares siguen llenos? ¿Por qué la gente los frecuenta aunque estén escasos de dinero? Buscamos relacionarnos con otras personas y al no tener espacios donde hacerlo la mayoría de la gente recurre a los bares, siendo cada vez menor el número y calidad de parques, plazas y espacios públicos.
También las personas buscan desconectar de la realidad de su trabajo, facturas y problemas acudiendo a estos lugares.
Si queremos o necesitamos espacios tomémoslos nosotrxs, no negociemos ni demos dinero a lxs mafiosxs de lxs bares.

VENTA DE ALCOHOL, TABACO Y OTRAS SUSTANCIAS

En los bares se negocia con veneno y donde, en general, aunque no te drogues te tienes que tragar el humo que otrxs expulsan. Son ambientes, por lo tanto, insanos y en los que las personas ahogan sus penas o alegrías, pero las ahogan. No suele ser agradable entrar en un lugar lleno de humo donde la gente va en estado de embriaguez. Además en muchos de estos locales también trapichean o dejan que se consuman otras sustancias estupefacientes a parte de las drogas legales.
También hay que recordar que los impuestos de tabaco y alcohol financian al Estado y a su ejército. Si de verdad queremos cambiar el rumbo de este mundo debemos empezar por reducir nuestro consumo al mínimo. ¿Si la gente reciclara más, sólo gastara en comer y okupara para vivir, se sostendría el capitalismo? Respóndete tú mismx. Consumir drogas es un gasto innecesario y dañino, te consume a ti y a tu cartera. Da igual que el tabaco y el alcohol sean legales, ¿acaso eso hace que sean menos letales? De hecho son legales porque conviene que así sea.

COMERCIO CON ANIMALES MUERTOS

Esta es sin duda, para mí, la parte más asquerosa de los bares y restaurantes (quedando los que son veganos a una escasa minoría). Después de algunos años de andanza por el veganismo te das cuenta lo injusto de este comercio sangriento, ya no por no poder comer nada cuando sales (esto es sin duda un capricho) sino por ellxs, lxs animales, ahí expuestxs tras las urnas de cristal. Es asqueroso observar el terrible espectáculo al entrar en cualquier bar; piernas, cabezas, trozos de lo que en su momento fue un ser que quería vivir libre y no pudo. Y todas esas bocas introduciéndose a lxs animales y sus mandíbulas moviéndose para devorarlxs, es terrible.

RELACIONES DE ESPUMA

Más allá del trabajo y la familia mucha gente no sabe relacionarse y busca en bares (quien dice bares también dice pubs y discotecas) una falsa amistad o relaciones efímeras y vacías.
La gente va al bar a desconectar de su absurda realidad y crean una ficción entre cervezas, ficción en las amistades también. Estas relaciones pueden ser pasajeras o tener un grupo de asiduos al mismo bar, en cualquier caso nada más allá que compartir frustraciones y cañas. Seguramente una persona que tenga amistades de espuma si por lo que fuera dejara de frecuentar el bar, esas personas desaparecerían de su vida.
Además el baboseo abunda en estos locales, donde el macho (o hembra) ibéricx reforzadx por su coro de imbéciles se anima a avasallar a la primera que se descuide. Si además el local en cuestión es de ambiente nocturno esta situación apestosa se multiplica.
ENRIQUECIMIENTO DE UNXS, EXPLOTACIÓN DE OTRXS

Los bares son negocios que dan mucho dinero, y no precisamente para el/la que trabaja de camarerx o limpiando platos; los grandes ingresos son para lxs propietarixs o jefxs del local (muchxs de ellxs son mafiosxs, policías o fascistas; mira bien donde entras).
El sector de la hostelería no está bien remunerado y además soportan grandes cargas de trabajo y estrés. A parte de a sus jefxs tienen la carga añadida de tener que aguantar a lxs clientes, les agrade o no, ya sean babosxs, borrachxs, personas impertinentes, con mala educación y con prisas. Además de tener que poner buena cara para ganarse una propina para añadir algo más a sus miserables sueldos.
También hay otras personas indirectamente explotadas en el negocio de la hostelería, como toda la gente que trabaja para proveedores (agricultorxs, transportistas, manufacturadores).

A MODO DE CONCLUSIÓN Y AÑADIDOS

Resumiendo, los bares son lugares a evitar porque nos hacen recluirnos en ellos por falta de espacios, porque son nocivos para la salud y comercian con drogas (legales o ilegales, da igual), porque comercian con la sangre de animales muertos y por su falta de ética, por las relaciones falsas que se dan en los bares y lxs babosxs que frecuentan estos lugares, porque te dejas tu dinero, y por la explotación que sufren las personas dedicadas al sector de la hostelería.
Quisiera añadir que aunque haya bares que se tilden de revolucionarios eso no les libra de ninguna de las críticas. Que pongan música reivindicativa, tengan carteles de Manis y alternativa vegeta no los convierte en algo diferente; sino que es una alternativa para enganchar a gente con ciertas inquietudes. También decir que aunque el bar se llame cafeta y esté en un CSO (centro social okupado) a lo mejor le quita algún asunto negativo (como la venta de carne, sólo en algunos casos) pero no se libran de las críticas. Un bar es un bar aunque se disfrace de revolucionario.