Nota aclaratoria: Este blog y la distri terminaron hace años por pertenecer exclusivamente a Jaime Sanchez Martínez, perpetrador y perpetuador de varias agresiones machistas a diferentes personas en el Estado Español, por eso desde aquí se insta a la retirada de cualquier material editado y/o escrito por la misma.

¡Boikot al anarcomacho! ¡No más cobertura a actitudes patriarcales ni a machistas infiltrados!

domingo, 27 de enero de 2013

SI TIENES MIEDO A SENTIR, ESTÁS MUERTA

Nuestras relaciones con las demás son muy importantes, de hecho demasiado importantes y no hay que basarlas en el interés o provecho propios, si no en la reciprocidad y en el darlo todo sin pedir nada. Muchas gracias a todas las que estáis conmigo en estos momentos y que me ayudáis a aprender, a quererme y a conocernos mejor a nosotras mismas. Si no fuera por vosotras todo sería mucho más difícil y me alegra saber que no sólo me queréis cuando estoy bien, si no que estáis hay para pasar juntas los momentos difíciles, otras sin embargo han basado mucho su relación conmigo en el interés y en recibir mis energías positivas, alejándose cuando flaqueo y dejando un vacío muy profundo en los momentos que necesitaba apoyo, afecto, confianza, comprensión y que me devolvieran esas energías que tanto necesito ahora. Elegir entre nuestras relaciones es una mierda, las personas no somos mercancías a las que elegimos en cada momento, somos seres complejos llenos de emociones, deseos, sentimientos, sueños... y si no sabemos relacionarnos de forma sana podemos hacernos mucho daño. Hay quien prefiere no compartir su sexualidad, emociones, sentimientos, proyectos y su vida en general con muchas personas a la vez y reducirlo a una mínima parte de sus relaciones, creando jerarquías emocionales, privilegios a unas pocas y cerrando las puertas de su ser a muchas. No estamos preparadas para todo y nunca lo estaremos, vivir es sentir y quien tiene miedo a sentir, tiene miedo a la vida y prefiere la monotonía, la seguridad y deja el riesgo para situaciones controladas con las que llenar lo que sus relaciones seguras no pueden llenar. Tenemos que estar llenas por nosotras mismas y no usar a las personas, no necesitarlas, usarlas y echarlas de menos. Tenemos carencias, pero el camino fácil nunca fue el mejor. Con paciencia y empatía podríamos compartir más y ser más libres, estancarse en la seguridad es renunciar a nuestros sueños. Y lo sueños, sólo se hacen realidad si de verdad lo quieres, las promesas se las lleva el viento y las mentiras remplazan a la verdad.